¿Dónde está la vida?
Dónde; el don de la muerte.
Porqué te fuiste amor mío...
condenándome con tu ausencia
a morir sin verte.
Voy ante el espejo
a ver al hombre
que muerto se detiene.
a ver al hombre
que muerto se detiene.
A quien tu huida
robó su vida,
dando guadaña,
dama de muerte.
robó su vida,
dando guadaña,
dama de muerte.
El sol en el ocaso
ya no brilla.
La cuerda abraza el cuello...
Ya nada la detiene.
ya no brilla.
La cuerda abraza el cuello...
Ya nada la detiene.
Derechos de Autor: Ricardo Picó Mora
Bonita su poesía
ResponderEliminarMi querido amigo que bella poesía tan profunda que llega al alma, usted tiene un don tan maravilloso. Saludos desde Ecuador. Magdy
ResponderEliminarGracias Magdi y gracias a nuestro anónimo amigo
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